jueves, 28 de octubre de 2010




                                VIOLENCIA SOCIOPOLITICA                                                 


EL DESPLAZAMIENTO FORZADO






Las condiciones de violencia que generan los conflictos internos en un país, provienen de problemas sociopolíticos que obligan necesariamente a un enfrentamiento entre actores armados y la fuerza pública, dejando no solamente miles de víctimas, sino también, una descomposición social y una huella imborrable en la conciencia de quienes la sufren.

A raíz de ésta violencia, los pobladores  huyen de sus tierras  ya que carecen de  algún tipo de garantías, puesto que perciben que el Estado es incapaz de brindarles protección.  Las tierras son abandonadas como consecuencia de los hechos de violencia que surgieron a raíz del conflicto interno, es entonces, cuando se plantea el dilema entre la propiedad y la vida, y el  resultado será: El desplazamiento forzado.

Del conflicto armado  que Colombia ha librado desde hace 45 años, no se ha salvado la sociedad civil o aquellas personas que no toman partido. Es de recordar que el Derecho Internacional Humanitario, es un conjunto de normas concebidas para proteger a las personas y evitarles el sufrimiento en tiempos de guerra. El DIH tiene normas que tendrán que ser respetadas por los gobiernos, por sus fuerzas militares y  también por los grupos armados al margen de la ley, o aquellos que  se encuentren siendo parte de un conflicto, sin embargo, estas normas no se cumplen.

Debido a la guerra que ha sufrido Colombia durante todos estos años,  existen alrededor de 1 millón y medio de desplazados. Son aproximadamente 170.000 familias con un promedio de 5 personas por familia. Los afectados principalmente, son las mujeres cabeza de familia, los niños y las comunidades indígenas y afro colombianas. Dicho conflicto obliga a las personas no solo a dejar sus tierras, sino, también todo su vínculo social y cultural, produciendo como consecuencia un desastre social.

La violencia sociopolítica ha dejado no solo miles de victimas, sino también una descomposición social. Por su parte, si inferimos que las relaciones sociales son el fundamento donde los seres humanos nos construimos históricamente como personas y como comunidad, entenderemos que este fenómeno como el que ha vivido Colombia durante tantos años, ha dejado un deterioro psicosocial y  una pérdida de autonomía, traducida en una pérdida de formas culturales y de descontrol social interno.

La violencia termina tristemente haciéndose parte de la realidad de los Colombinos, creando efectos psicológicos graves. El fatalismo se apodera de sus víctimas de tal forma, que viven en una incertidumbre e inseguridad total,  adoptando una postura de conformidad, resignación y apatía. (Martin-Baró)

El impacto que surge entre los individuos que viven las consecuencias de la violencia sociopolítica les genera efectos de deshumanización. El contexto histórico desde donde dicho individuo ha elaborado y realizado su existencia con relación a las relaciones sociales, ha sufrido un impacto. En consecuencia, la violencia genera una descomposición, un desgaste y un desastre social y una destrucción de las formas culturales, afectando las relaciones sociales y deteriorando lo colectivo. Se puede considerar entonces la violencia, como un problema público puesto que sus efectos no son ni aislados ni individuales, “devienen de condiciones históricas de un contexto preciso y de sus condiciones políticas, económicas y sociales que lo caracterizan”. Y de un momento histórico particular y en un contexto específico.

La violencia genera agresividad en las personas. El dolor sufrido por ellas y la angustia vivida, terminan destruyendo los lazos sociales convirtiéndolos en seres que se vuelven impredecibles, en seres que no conforman hábitos o que no hacen memoria.

Ya que la reconstrucción de estas vidas se tiene que dar en medio de pérdidas humanas, materiales, en medio de la depresión, la venganza y la culpa, la memoria de las comunidades afectadas por la guerra será una memoria dolorida.

Estas condiciones de violencia que surgen de la guerra, son problemáticas que hay que analizar desde una visión psicosocial, con el fin de poder identificar aquellos elementos importantes para así obtener una intervención precisa y oportuna sobre sus afectados.

De ésta forma, la recuperación del amor por la verdad, la recuperación histórica de los pueblos, la reconstrucción social de la realidad, la recuperación de la esperanza para que puedan afrontar la larga historia de violencia, se tendrá que efectuar desde un trabajo en equipo, insertando propuestas colectivas con el propósito de recuperar los lazos sociales y culturales. Hay que asumir una postura analítica y critica con tal de poder desnaturalizar estos conceptos que deshumanizan,  para así evitar el desgaste en las relaciones sociales y poder tener pueblos que a pesar de haber vivido con y en la violencia, puedan a través de una visión psicosocial, promover una acción con interés emancipatoria y transformadora.

La visión psicosocial  se encargará entonces, de recuperar la memoria histórica y un entorno socio afectivo,  reparará el tejido social rasgado, transformará el pasado y lo logrará acompañando, asistiendo, ayudando, empoderando, potencializando la organización comunitaria y dignificando la vida.

Una visión psicosocial que tendrá que ser vista como nos mostró Ignacio Martín Baró, como psicología política, histórica y crítica para que contribuya a la consolidación de un nuevo poder social sobre dichos pueblos. Una psicología social, pero una psicología social Latinoamericana que fue vista por Martín Baró como una disciplina basada en principios éticos con el fin de potencializar la dignidad humana de nuestros pueblos Latinoamericanos.








JUAN SEBASTIAN HOYOS ÁNGEL.


BIBIOGRAFÍA: Martín Baró, I.  (2000) Guerra y Salud Mental. En: Martín Baró, I. & Colab. (2000) Psicología Social de la Guerra. El Salvador. UCA Editores. Págs. 24-40.

Londoño, S. (2008). Papel de la psicología social en el marco del conflicto armado. Documento de trabajo para la cátedra virtual Ignacio Martín Baró

Gaborit (s.f.) Reconstruir el tejido social mediante la práctica de transformar el pasado: diseño de una intervención en violencia política. Documento de trabajo para la cátedra virtual Ignacio Martín Baró. 

10 comentarios:

  1. Está muy bien. Tocas aspectos importantes, cifras, análisis que retoman los aspectos relacionados con contexto, historia y política en las Ciencias Sociales. Debes citar no obstante mejor.

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  2. Este blog es muy interesante, en la conceptualización establece los hechos, cifras, datos específicos que me permiten conocer esta problemática social que es el desplazamiento forzado.
    Creas una estrecha relación entre el trauma psicosocial y los planteamientos de Ignacio Martín Baró.

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  3. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  4. debo decirte que me gusto mucho tu blog, muestras un analisis muy bien estructurado donde no solo expones muy bien la problematica sino que conjuntamente enlazas la situacion con los problemas de Martin-baro.

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  5. JUAN SEBASTIAN HOYOS ÁNGEL, estoy de acuerdo con su analisis, esto finalmente es un problema de todos y todas, pues como lo señalas esto será siempre como un ciclo qué, además de determinar a un pueblo, cosecha cada vez espacios más dolorosos de violencia.

    Por Carlos Bobadilla

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  6. Me parece un texto interesante que aborda la problemática del desplazamiento en Colombia de una forma clara y precisa. Lo que si quizá veo es que no hay citas a lo largo del texto que acompañen la lectura, quizá hubiese sido más enriquecedor citando porque da un soporte de aquello que expones.

    También traté sobre el desplazamiento en Colombia y veo que así tratemos los mismos temas, siempre hay elementos en el discurso que lo hacen más humano, más cercano al conflicto y creo que logras eso de cierta forma.

    Espero que mi aporte sea valioso para tí.

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  7. Esta problemática es neurálgica y muy común en el orden social de nuestro contexto. Me parece que el aporte en este sentido es valioso en la medida que permita adoptar una posición menos indiferente ante un conflicto que termina, no sólo teniendo efectos en la comunidad concreta, sino en todo el tejido social del País. Como tu cuentas, se trata de unos serios sucesos que dejan secuelas dicilmente de borrar y que ya se viene prolongando durante mucho tiempo. Pienso así como tu mencionas que el papel del psicologo social es fundamental para la reparación de las heridas que permitan un mejor porvenir en general.

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  8. Interesante texto, por lo que he visto en los demás blogs este fue un tema que llamo mucho la atención, quizás sea por que es uno de los problemas más visibles en las ciudades. Esgrimes muy buenos argumentos y aportas un punto de vista muy importante el cual se encuentra muy bien conectado con los lineamientos sobre el trauma psicosocial y la psicología social de Ignacio Martín Baró, felicitaciones.

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  9. Este tema es bastante complejo, la dignidad y la identidad de las personas es totalmetne ultrajada, de ahi que el trauma psicosocial es bastante profundo, y muchas de estas personas siguen viviendo una tragedia aun despues del desplazamiento. creo que es importante reconocer el buen trabajo y que es bien completo.

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  10. queda muy bien planteado el conflicto que estas personas sufren, el trauma pscicosocial es bastante tragico, puesto que no pueden recuperar su vida hasta tanto el Estado no se apropie de su tragedia, por esto considero que es necesario

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